Independientemente de los trabajos que venimos desarrollando en los últimos años en lo que se refiere al marcaje y seguimiento de ejemplares, así como detección y evaluación de enfermedades infecto-contagiosas del águila de Bonelli, especialmente en Andalucía y la Comunidad de Madrid, nos llega ahora de la Comunidad Valenciana información de gran interés al respecto.
De la mano de Antonio Quilis, director del diario web elmundoecologico.es, os brindamos la entrevista realizada por Cadena SER / Madrid Norte sobre el proyecto LIFE Bonelli. Ernesto Álvarez, presidente de GREFA, hizo balance de este proyecto en el que estamos tan involucrados, con el objetivo de recuperar las poblaciones españolas de águila de Bonelli o águila perdicera.
Como desarrollo del proyecto LIFE Bonelli, durante 2015 hemos liberado doce ejemplares de águila de Bonelli, también conocida comúnmente como águila perdicera, en la Sierra Oeste de la Comunidad de Madrid. De estos ejemplares, once continúan en libertad, mientras que uno tuvo que ser capturado por una malformación en un ala. Pues bien, después de varios meses en el área de liberación, algunos de ellos han decidido poco a poco marcharse.
Han pasado ya más de dos meses desde que colocamos un emisor GPS al águila de Bonelli o águila perdicera Dueña, en la actualidad asentada en el territorio del valle del Tajo que le vio nacer, a caballo entre la Comunidad de Madrid y la provincia de Toledo. Se trata de un pollo nacido en libertad y que es descendiente de una de las pocas parejas de la especie cuyo territorio se adentra en territorio madrileño.
Las cuatro águilas de Bonelli que siguen fijadas al territorio del hacking situado este año en Lumbier (Navarra) están comenzando los movimientos predispersivos; por el momento se mueven principalmente por la Reserva Natural de La Piedra y San Adrián, practicando el vuelo y defendiendo el territorio de buitres leonados, milanos reales y negros o cernícalos.